Subí corriendo a la habitación y empecé a hablar con mi hermana por WhatsApp pero lo dejamos al rato, a si que me puse a escuchar música de todo tipo pero especialmente de ellos. No puedo estar una hora sin escuchar sus canciones. No sé exactamente cuanto estuve pero creo que 4 horas escuchando música, cuando llamaron a la puerta. No me imagino quien será a estas horas pero al abrir la puerta vi a mi padre y pegue un salto para abrazarle. 5 días sin verle se hacen eternos. Y ahora que lo pienso llevo; 2 días sin ver a mi madre y cada vez queda menos para que volvamos a España.
-¡¡PAPÁ!!
-¡¡HIJA!!
-¿Dónde has estado? Estaba preocupadísima.
-Me llamaron del trabajo y tuve que volver a España.
-Pues haberme avisado. Aunque también llevo dos días sin ver a mamá, y me tiene preocupada.- De repente baja Robby y me da un susto por de tras.- ¡Robby!- grito del susto
-¡Diego!-se abrazan- Estabamos preocupados por ti ¿dónde estabas?
-Volví a España porque me llamaron del trabajo. Pero aquí me teneís, no os preocupeis más. - riendose- Una cosa ¿no me invitais a pasar?
-¡Oh! Claro pasa, pasa - contestamos a la vez
-Menos mal, ya era hora. Gracias
-No hay de que - respondiendo Robby mientras andamos hacia en salón y nos sentamos en los sofás.
-Bueno y ¿qué te mandaron hacer en el trabajo para tener que volver en vacaciones a España?- pregunto con muchísima curiosidad.
-Bueno... emmm... como te lo explico...- dubitativo, se pasa la mano por la cabeza
-¿Qué pasa? Papá - asustada
-No volví a España por que me llamaron del trabajo.
-Y... entonces... ¿por qué volviste?
-Porque tu madre y yo... nos vamos a... divorciar
-¿¿¿QUÉÉÉÉ??? No, no puede ser, ¿por qué?
-Creeme, si pudiera contarte el por qué,te lo contaba, pero tu madre no me deja.- empiezo a llorar
-Solo tengo 17 años y ya tengo que pasar por estas cosas. Es increible.
-Lo sé hija, lo sé y no quería ser el que te lo cntase por no verte llorar- nos abrazamos como si fuera la última vez.
-¿Teneis que ir a juicio?
-Si, para ver quien se queda con tu hermana y contigo
-¡Qué asco! Quedaba un mes para mi cumpleaños y solo quedan 4 días para volver a España
-¿Cuándo se lo vas a contar a los demás? - pregunta Robby
-Ellos ya lo saben, vosotros sois lo últimos en enteraros.
-Encima eso, nosotros lo últimos, ¿y qué más?- contesto
-Lo siento mucho, hija, no quería que pasases por esto- entran Christine y mi abuela Mary y se sorprenden al vera mi padre de vuelta.
-¿Qué haces aquí? - pregunta Christine enfadada
-Vine a contarle, perdón, a contarles lo de Alexandra y yo.
-Okay, ¿ya se lo contaste?
-Si
-Pues ya te estas largando.
-¡Mamá!- se asombra Robby al ver a su madre así de borde.
-Robb, tu no te metas.
-Vaale.- se frustra
-¡No! Aunque se vaya a divorciar sigue siendo mi padre y yo no quiero que le traten así.- digo amenazante.
-¿Todavía estas de su lado? Amm... no te ha dicho el por qué ¿verdad?
-No, me dijo que mamá le dijo que no lo contase.
-Y todavía va y miente a su hija.- dice a los cuatro vientos - Nunca has tenido el valor suficiente para contar las cosas y así has acabado.-amenaza Christine segura de si misma.
-Pero ¿por qué fue?- pregunto
-Di se lo tu mismo y a ver si se te cae la cara de vergüenza.- vuelve a amenazar.
-La llevo engañando con otra chica desde hace dos meses.- me explica mi padre el por qué.
Esta vez no aguanto y me dirijo a la puerta para salir a la calle para olvidarme de todo.
-Alexis, espera- me dice Robby- voy contigo
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